El fin justifica los medios, podría decirse. Cualquier actividad cuyo objetivo sea el fomento de la bicicleta es, en sí, bueno.
Pero creo que necesitamos ya un cambio de mentalidad profundo. La actividad a la que me refiero, como muchas otras a través de los municipios de nuestro país, es un paseo en bicicleta por Miguelturra. El año pasado, con una enorme participación, no superamos los 5 kilómetros por hora de velocidad. Una actividad lúdica y, extraoficialmente, reivindicativa sin competición, sin velocidad y sin metas.... Entonces, ¿por qué está organizada por el área de deportes y no por el área de movilidad o la de sostenibilidad? Pues porque seguimos viendo a la bicicleta como un mero objeto deportivo, no un vehículo que puede solucionar los problemas en nuestras ciudades.
A pesar de ello, bienvenido sea, y allí nos veremos.
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