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martes, 16 de octubre de 2012

La muerte invisible (o casi).

 
Sólo una nota.
He estado sacando trastos acumulados durante 12 años en la cochera de mi casa. Tengo en ella dos coches que uso bastante poco y cada vez menos, sobre todo "el grande", que es diesel.
Pues bien, todo lo "recuperado" de armarios y baules tenía una fina película negra. ¡Y no era polvo! Tras las dos jornadas, las mucosidades salían de color negro (será asqueroso pero es la pura verdad).
Y esto sólo del momento que se tarda en arrancar los motores y salir a la calle.
Como dijo un amigo mío, si se pusiera un tinte a los combustibles para ver lo que vamos soltando por el tubo de escape, a mucha más gente se les quitarían las ganas de usar el coche. Aunque, ahora que lo pienso, ¡sí que se ve, en forma de "boina" sobre las ciudades! Y nadie hace nada... (¡Si luego llueve y desaparece por arte de magia!)
Por lo menos he hecho bastante más hueco para las 5 bicis que habitan mi "bicicletera".

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