Tengo que reconocer que esta bicicleta me plantea el reto mayor al que me he enfrentado hasta ahora. Su estado de conservación es de los que hace que te plantées si merece la pena o no su restauración: elementos en muy mal estado, carencia de muchas piezas, partes rotas, piezas de otras bicicletas... Si hace un poco tiempo la hubiese visto por ahí, pensaría que no eran más que unos hierros dignos de cualquier desguace.
Pero viendo lo, por otro lado, completa que está, cubrecadenas incluído, me voy a arremangar e intentar devolverla a la vida y recuperar su valor cultural en la historia.
El aspecto general es bastante deprimente. Sin guardabarros, sin freno delantero, sin puños... Pero con un aire "coqueto".
La única maneta de freno que conserva es una Shimano moderna.
Los pedales están también maltratados. Espero poder recuperarlos.
Lo peor de la bici es el transportín. Totalmente oxidado y con el cepo perdido. El soporte para la dinamo trasera también está partido.
El sillín, que desde la primera vez que lo ví me recordó al de la BH Gacela, necesita un retapizado total.
La tija es de un diámetro inferior por lo que se la añadió un adapatador que debió meterse a martillazos, dañanado el frontal de collarín de cierre.
Y, efectivamente, el sillín que recordaba al de la Gacela es BH. Deciciré si se queda ahí o pasa a mi Gacela.
El cubrecadenas está en buen estado y con su calca original.
Más calcas originales. Si existiera ina forma de quitarlas sin que se rompieran...
Detalle del collarín de cierre del manillar.
En fin, sé que monetariamente esta bici no compensa, pero a estas alturas no soy capáz de desdeñar ninguna, así que, ¡manos a la obra!
1 comentario:
hola la bici esta buenisima,yo tengo una pero no la puedo usar por que no puedo conseguir las cubiertas, si sabes me podes mandar un mail a paulost@hotmail.com.ar gracias saludos y dale vida a la bici que esta buena
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