29/06/2010
Salimos desde Blokzijl. Como las bicicletas están en tierra, no hay que cumplir con el protocolo diario de bajarlas del barco.
Cuando llevamos a penas un kilómetro, uno del grupo sufre un pinchazo. Tras un buen rato arreglándolo seguimos la ruta pero, al poco, la rueda vuelve a desinflarse. Perdemos una media hora.
Salimos desde Blokzijl. Como las bicicletas están en tierra, no hay que cumplir con el protocolo diario de bajarlas del barco.
Cuando llevamos a penas un kilómetro, uno del grupo sufre un pinchazo. Tras un buen rato arreglándolo seguimos la ruta pero, al poco, la rueda vuelve a desinflarse. Perdemos una media hora.
Salida desde el embarcadero.
Pedaleamos por el polder del Noreste en dirección a Giethoorn, teniendo que cruzar un pequeño canal en un transbordador.
Saliendo del transbordador.
Pedaleamos entre urbanizaciones a las que sólo se puede acceder en bici o en barco, con bonitos paisajes verdes, lagos y canales, pintorescos puentes de madera y casas con el tejado de juncos.
Instalando un tejado de juncos.
Puentes de madera característicos de la zona.
Parte del grupo en una parada.
Llegamos a Giethoorn, otra de las Venecias del norte, aunque esta guarda más parecido (salvando las enormes distancias). Ciudad fundada alrededor del 1280, consta de un canal principal y muchos ramales laterales, pensados en un principio para el transporte de turba, que le confieren un caracter muy especial.
Distintas vistas de Giethoorn desde tierra.
En Giethoorn, existen un tipo de barcas tradicionales, llamadas punt, que se mueven mediante pértigas, pero el grupo decide alquilar barcas con motor eléctrico, en las que caben 8 personas. En ellas visitamos los canales y el lago que rodean la ciudad.
En las barcas eléctricas.
Molino sin tejado en Muidenweg (la vía del molino).
Vista del lago.
Dejamos Giethoorn por un camino en el que hay 42 puentes de madera para dirigirnos a una playa. Tras volver a perdernos un par de veces, el tiempo se cierra de repente y empieza a llover, por lo que decidimos ir directamente a Zwartluis (esclusa negra), donde se encuentra el barco.
Llegando a Zwartluis.
Un pequeño refugio para la lluvia.
Cuando llegamos al pueblo ha dejado de llover, por lo que nos vamos a dar un paseo por el mismo y compramos comida en el supermercado.
La ciudad es moderna, con bares con terraza alrededor de un canal, como casi todas las ciudades nuevas que encontramos en la ruta.
La ciudad es moderna, con bares con terraza alrededor de un canal, como casi todas las ciudades nuevas que encontramos en la ruta.
Iglesia en Zwartluis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario