Pinchazos y más cosas

Llevo tres pinchazos en tres días. ¡Dos de ellos con una diferencia de 10 minutos!
Estos son los momentos en los que acabas harto de la bici...
Pero duran poco. Lo que sí que hemos hecho todos nada mas volver de Holanda ha sido subir sillines y manillares. ¡Qué dolor de piernas!
Allí hemos tenido verdaderos caballos de pedaleo, algo grandes para nuestra talla pero a la larga mucho mejor, ¡cómo andan esos bichos! Nos hemos tenido que ir allí para comprobar que teníamos el sillín demasiado bajo.

Las bicicletas del viaje eran alucinantes (marca Azor, made in holland): Cadena totalmente carenada, frenos de tambor en ambas ruedas, dinamo en el buje delantero, caja de velocidades internas en el buje trasero con un cambio la mar de suave con un solo "click"...
Así que, cuando hemos vuelto, nuestras bicis nos han parecido pequeñas y anticuadas. Pero se nos ha pasado pronto. Unos ajustes de altura y a rodar.

Otro pequeño detalle holandés (aunque la foto es penosa): las válvulas son intercambiables. Tuvimos problemas con una en el circuito. Se desenrosca del cilindro que la une a la cámara y se pone otra. ¡Así de simple! Tecnología del chupete para una gente que usa la bici a diario.