Nos congratulábamos hace ya tiempo en este mismo blog de que el ayuntamiento de nuestra localidad había aprobado, ante la negativa del de Ciudad Real de plantear ni siquiera la construcción de la pasarela ciclista/peatonal sobre la A43, la ampliación de la vía verde para conectar ambas localidades por una ruta alternativa, el Camino de Peralvillo.
Debimos darnos cuenta en aquel entonces de que la frase "ampliación de la vía verde" tenía justo ese carácter, aunque desde el ayuntamiento se ha vendido la falsa esperanza de que era una vía para facilitar la movilidad no motorizada entre ambas localidades. Y digo que este término nos debería haber puesto en alerta porque el tramo que ya estaba construído de vía verde dentro de la localidad es impracticable para bicicletas "de movilidad", con firme de grava, lleno de aparatos de gimnasia, bancos, árboles y personas paseando o niños jugando, es decir, un parque alargado en toda regla y no un paso alternativo accesible, paso que sí se puede realizar en la enorme calzada adyacente.
Pues bien, obviando toda toma de contacto con de quienes partió la idea original de esta vía no motorizada, ni con quienes al final tienen que utilizarla, sin conocer el firme que va a tener, ni los accesos a la misma que quedan totalmente cortados desde las calzadas subyacentes (sólo se puede acceder si ya has recorrido los tramos ya existentes de vía verde), se ha comenzado a construír esta ampliación, porque es lo que es y no un carril bici/peatonal para llegar a Ciudad Real.
La mayor sorpresa de esta obra me llegó el otro día, cuando, viendo que la anchura de la vía es poca, me encuentro con que se han plantado árboles en medio de la misma. ¿Una división entre peatones y ciclistas? Puede, pero no deja espacio suficiente como para una doble dirección de bicicletas. Y estoy hablando de MOVILIDAD, que se supone es lo que se pretendía y no de OCIO, que es lo que siempre se malentiende por moverse en bici. Si lo que se pretende es proveer de un caminito para paseos domingueros, hasta puede que esté bien. Si estamos hablando de movilidad en un vehículo a pedales, para ir al trabajo, de compras y demás, no cumple los mínimos requisitos de posibilidades de velocidad ni accesibilidad.
Y esto ocurre por lo de siempre: la autosuficiencia y sobreestima de aquellos que deben diseñar cualquier espacio urbano, de espaldas a sus usuarios y sin contar con su opinión. Eso sí, se vende como un logro y para un uso para el que no está diseñada. Es como llenar una piscina olímpica de bolas de colores en lugar de agua, para entrenamiento de nadadores profesionales. ¡Qué mona es, pero totalmente inútil para sus pretensiones!
Pero aún no hemos llegado a la peor parte. Se suponía que dicha vía llegaría a su término a una futura rotonda, para reducir la velocidad de los coches que circulan por el Camino de Peralvillo, vía limitada a 50 km/h. en la que se violan los límites constantemente en varias decenas de kilómetros.
Es conocido que la jefatura de la policía local de Miguelturra no está por la labor de reducir ni poner trabas a aquellos pobres usuarios de vehículos a motor, con perlas tales como "no voy a dejar que las bicicletas campen a sus anchas por cualquier lado", ante nuestra porpuesta de calles de circulación a contrasentido para bicis, o de la propuesta de algunos "stop" en lugar de "cedas el paso" para puntos conflictivos y sin visibilidad. Pues siguiendo la tónica, esta jefatura de la policía local no considera viable poner una rotonda en el punto indicado, ni ningun tipo de cortapisas a los coches. Juzgad por vosotros mismos a dónde va a morir la vía verde y si no se van a producir, por desgracia, más muertes que la de la propia vía (tened en cuenta que en esta bajada muchos descerebrados alcanzan los 80 km/h. o más):
Dentro del círculo rojo está la incorporación y ahí se suponía que iba una rotonda, con todas las trabas necesarias para frenar a los coches. Es una bajada desde un puente, en curva y sin visibilidad. Imagináos incorporaros con una bicicleta para girar a la izquierda, hacia la subida, sin ver si viene alguien y encontraros un energúmeno a 90 km/h. que encima, si no se os lleva por delante, te pitará furioso por haberte incorporado a la velocidad de una bicicleta.
Si lo que se pretende es llenar esta zona de "bicis blancas" se ha logrado perfectamente (luego vendrán las lamentaciones y los funerales institucionales). Si lo que se quiere es que se dé un paseo hasta aquí y se regrese al pueblo, es para lo que parece que se ha construído. Si lo que se pretendía, y lo que se sigue vendiendo desde el ayuntamiento, era una alternativa de movilidad no motorizada, además de falsa es inviable.
En fin, una pena como tantas otras "brillantes ideas" de este país...
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